Los pies
y las manos...
y las manos...
"…A nivel del pie, las acciones musculares están orientadas hacia objetivos muy concretos: el apoyo y el andar…” Blandine Calais –Germain. Anatomía para el movimiento
El "trípode" del Pie
El "trípode" del Pie
A partir de esta imagen de trípode o triángulo e incluyendo al eje del pie (línea imaginaria que se traza desde el talón hacia el 2do. dedo), trabajamos los apoyos y la reorganización de la postura. El pie y su relación con la pierna y la cadera. El apoyo y el movimiento al andar.
Ahora cito a Térèse Bertherat: “(…) un dedo del pie, puede trabar los movimientos naturales de la pierna, de la cadera, y aún de la misma nuca…” y sigue diciendo: “…la soltura de los movimientos depende de nuestra capacidad de estar en equilibrio sobre nuestros pies…. Son la base (…)”
Muchos se sorprenden al darse cuenta de que sus dedos del pie “no se mueven”, “no se separan” o “crujen”.
Un recurso que utilizo, es la pelotita de tenis que ayuda a auto –masajearse, y nos permite sensibilizar la planta y los dedos del pie. Ayuda a “despertarlos”.
Otro "truco" para sentir el trípode del pie, son las "castañas".
En los pies se encuentra reflejado el mapa de todo el cuerpo.
Los pies son nuestro Arraigo cuando estamos de pie, así como nuestros isquiones lo son al estar sentados.
Otro "truco" para sentir el trípode del pie, son las "castañas".
En los pies se encuentra reflejado el mapa de todo el cuerpo.
Los pies son nuestro Arraigo cuando estamos de pie, así como nuestros isquiones lo son al estar sentados.
¿y a nivel de la mano?
Sigue Blandine: “…a nivel de la mano, por el contrario, las posibilidades y objetivos de la acción son múltiples…”
Trabajamos la movilidad de nuestras manos y su conexión con el brazo y el hombro. Relacionamos el estiramiento de los músculos de la mano y del brazo con la movilidad del hombro y de toda la caja torácica.
El reflejo de todo el cuerpo en los pies y en las manos, como si fuera un mapa, me hace pensar en que trabajar sobre los pies y las manos, nos conduce a nuestra propia "geografía" y nos ayuda a descubrirnos a nosotros mismos.
Laura mencionas la "pelotita de tenis", mi fiel compañera durante casi 9 meses, después de haber tenido una fractura de tibia, peroné y maléolos. Es increíble como perdemos la percepción de nuestro cuerpo hasta que por algo muy puntual aprendemos a poner la atención en el cuerpo. Aprender a caminar nuevamente y de manera conciente recuperar el equilibrio para comenzar a avanzar, fue por lo menos para mí, el primer paso para un gran cambio. Me encantó el artículo.
ResponderEliminarMuy buena y compartida información, también el video de la Cruz Roja te felicito. Besos M.Eugenia, Bs.As. Argentina
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